agosto 01, 2008

Vacaciones de medio año.

Estas vacaciones han sido (son) muy reflexivas, tranquilas, de alguna manera muy lineales y hasta pasivas (si es que es una buena descripción), no he dormido bien , con excepción de la noche del 25 de julio, tal vez por lo que ocurrió esa misma tarde o tal vez por que mi cama estuvo bien tendida y ordenada.
He tenido tiempo, mucho tiempo, para hacer y conocer cosas interesantes, y hasta personas interesantes, para escribir en este blog, para fumar, y ya no fumo mucho (casualmente ahora fumo), para beber café (y ahora también tomo una taza), para ir a exposiciones de artes, y a esta ultima feria del libro, he tenido tiempo para caminar, escuchar buena música, pasear por Miraflores (generalmente acompañado), e incluso repasar matemáticas por que lamentablemente (o heroicamente) desaprobé matemática, lo cual ya estaba escrito.
La rutina se transforma de la siguiente manera:
Me despierto (relativamente temprano), y me quedo observando las grietas ligeramente marcadas en el techo de mi cuarto y con la música del mini-componente me alegro solo el despertar, ya que mamá esta de viaje, papá trabaja y mi hermana también. Ya despierto, no tiendo mi cama (lo hago después) pero deambulo por el pasillo, la sala, el comedor y la cocina, donde me preparo un café (y no sé si me esta haciendo daño) lo tomo y me baño, me cambio, y a veces voy donde la dentista, y empieza el masacre (por que siempre odie ir a ese lugar), o a veces me quedo en casa luego voy a repasar matemáticas donde un fiel y mal amigo.
Almuerzo en un bonito restaurant, acá en la Molina, solo (creo que siempre será mi destino), y me voy, generalmente, a la mesa de al fondo, en un balcón, para mirar los arboles y las aves, pido algo rico, ya que el dinero que papá me deja en mi mesa, sirve para degustar algo, últimamente almuerzo en casa, trato de ahorrar.
En las tardes (que se pasan lentamente) trato de salir (extrañamente hoy no he salido) acompañado, o no, siempre tengo algún lugar donde salir, a un café, a caminar, al billar o a la casa de mi primo, pero trato de no pasar el día en la casa, me aburro.
Luego llego a casa, leo algún buen libro (últimamente “Memoria de mis putas tristes” de Gabo Márquez) y espero que mis ojos se adormezcan y logre dormir bien (que es imposible), porque los días de mis vacaciones siempre serán rutinarios con el invierno húmedo de esta ciudad triste, solitaria, y aburrida, casi casi… como yo.

1 comentario:

Luis omar dijo...

Dejate de cojudeces. Esta bien, pero tienes que priorisar, ya que primero son tus estudios y lo que estas escribiendo que es tu HOBBIE, PUEDES HACERLO DEPSUES DEL VEINTE DE NOTA.
Exitos,
LVV